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Dos inspectores de alimentos del condado de Miami-Dade fueron arrestados tras una extensa investigación por corrupción que se prolongó durante casi un año y reveló que extorsionaban a propietarios de restaurantes a cambio de dinero en efectivo, según informaron las autoridades.
La Operación "Trampa de Grasa" inició en abril de 2024 luego de que varios dueños de restaurantes denunciaran ante la policía de Miami-Dade que estaban siendo extorsionados por empleados del condado. Así lo anunció la alguacil condal Rosie Cordero-Stutz durante una conferencia de prensa realizada este miércoles junto a la Fiscal Estatal de Miami-Dade, Katherine Fernández Rundle.
Los inspectores exigían dinero bajo amenazas de cerrar los establecimientos o imponerles multas elevadas, explicó Cordero-Stutz. Alegaban que los restaurantes tenían trampas de grasa defectuosas y ofrecían la opción de pagarles en efectivo para evitar sanciones.
"Los dueños sentían que les estaban robando. Era su negocio, y se veían obligados a decidir entre recibir infracciones, cerrar o pagarle a estos individuos cientos de dólares", comentó Fernández Rundle.
En mayo de 2024, un mes después de iniciada la investigación, la policía detuvo a Charles E. Bryant II, inspector del Departamento de Gestión de Recursos Ambientales de Miami-Dade. Posteriormente, fue arrestado un segundo sospechoso, Craig A. Bethel, quien también trabajaba en el mismo departamento. Sin embargo, la policía determinó que operaban de manera independiente dentro del mismo esquema de corrupción.
Ambos enfrentan cargos por compensación ilegal, esquema fraudulento y mala conducta oficial, según informó la alguacil Cordero-Stutz. Hasta el momento, se ha confirmado que los acusados extorsionaron al menos a 15 negocios, acumulando más de 14,000 dólares. No obstante, las autoridades creen que podría haber más víctimas.
"Una denuncia nos llevó a una segunda víctima, y esta nos condujo a un segundo sospechoso. Creemos que hay más afectados y posiblemente más personas involucradas en este tipo de extorsión. Es fundamental que la comunidad denuncie si tiene información sobre estos hechos", instó Cordero-Stutz.
Las autoridades han pedido a los propietarios o administradores de restaurantes que hayan sido víctimas de extorsión que se comuniquen con la Unidad de Corrupción Pública de la Oficina del Sheriff de Miami-Dade al 305-599-3121.
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