El presidente electo Donald Trump ha anunciado su intención de firmar una orden ejecutiva para poner fin a la ciudadanía automática para los hijos de inmigrantes indocumentados nacidos en territorio estadounidense, con el objetivo de reducir incentivos para la inmigración ilegal hacia Estados Unidos.
Sin embargo, la viabilidad de esta medida enfrenta serios desafíos judiciales.
En un video de más de tres minutos, Trump afirmó que “Joe Biden ha permitido una invasión ilegal en nuestro país, permitiendo que un número récord de extranjeros ilegales crucen nuestras fronteras.
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Aunque estos millones de personas ingresaron de manera ilegal, todos sus futuros hijos recibirán ciudadanía estadounidense automática”.
Según Trump, esta política fomenta la inmigración ilegal al ofrecer una “recompensa” para quienes violan las leyes de Estados Unidos.
La declaración de Trump revive un largo debate sobre la interpretación de la Cláusula de Ciudadanía de la 14ª Enmienda de la Constitución de EE.UU., que establece que, con pocas excepciones, las personas nacidas en Estados Unidos obtienen automáticamente la ciudadanía, independientemente del estatus migratorio de sus padres.
Durante años, legisladores han intentado sin éxito modificar esta interpretación para restringir la ciudadanía por nacimiento.
Trump y su compañero de fórmula, JD Vance, expresaron durante la campaña su respaldo a la idea de reformar la enmienda. En su anuncio, Trump explicó que “desde el primer día de mi mandato, firmaré una orden ejecutiva para que las agencias federales interpreten correctamente la ley, estableciendo que los hijos de inmigrantes ilegales no recibirán ciudadanía automática”.
Además, Trump manifestó que la medida también pondrá fin al "turismo de nacimiento", al que describió como una “práctica injusta”. Aseguró que personas de todo el mundo viajan a Estados Unidos en las últimas semanas de embarazo para asegurar la ciudadanía estadounidense para sus hijos, aprovechando luego la llamada “migración en cadena” para obtener beneficios migratorios para sus familiares. “A partir de ahora, al menos uno de los padres deberá ser ciudadano o residente legal para que el niño obtenga la ciudadanía”, agregó.
No obstante, expertos legales advierten que es altamente improbable que la medida prospere. Cambiar un texto constitucional o reinterpretar la 14ª Enmienda requeriría apoyo legislativo o judicial significativo, y es probable que la orden de Trump enfrente impugnaciones inmediatas en los tribunales.