Exclusiva de Kyiv Post
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SUSCRIBITELa Casa Blanca de Trump se inclina hacia la aceptación de demandas clave de Rusia, lo que fortalece al Kremlin en su intento de socavar a Zelensky y definir el fin de la guerra según los términos de Moscú.
Exclusiva de Kyiv Post
El plan de paz propuesto por Rusia incluye cuatro puntos principales:
Reconocimiento de la anexión de Crimea: Rusia busca que la comunidad internacional reconozca la península de Crimea como parte de su territorio, tras su anexión en 2014.
Neutralidad de Ucrania: Se propone que Ucrania adopte un estatus neutral, renunciando a sus aspiraciones de unirse a la OTAN y a la Unión Europea.
Autonomía para las regiones del este: El plan aboga por otorgar un alto grado de autonomía a las regiones de Donetsk y Lugansk, controladas por separatistas prorrusos.
Levantamiento de sanciones: Rusia exige el levantamiento de las sanciones internacionales impuestas tras la anexión de Crimea y su implicación en el conflicto en el este de Ucrania.
La aparente disposición de la administración Trump a considerar este plan ha generado preocupación en Kiev. Funcionarios ucranianos temen que aceptar estas condiciones equivaldría a ceder a las demandas rusas, lo que podría socavar la soberanía e integridad territorial de Ucrania.
Además, la Casa Blanca ha comenzado a promover una narrativa que responsabiliza a la expansión de la OTAN y a la supuesta discriminación contra los hablantes de ruso en Ucrania como desencadenantes del conflicto. Esta perspectiva, que coincide con la posición del Kremlin, ha sido desacreditada en múltiples ocasiones desde la anexión de Crimea en 2014.
Paralelamente, se ha observado un esfuerzo por parte de Washington para cuestionar la legitimidad del presidente Zelenski. Este enfoque podría debilitar aún más la posición de Ucrania en las negociaciones y favorecer los intereses rusos en la región.
La comunidad internacional observa con atención estos desarrollos, ya que cualquier cambio en la postura de Estados Unidos respecto al conflicto en Ucrania podría tener implicaciones significativas para la estabilidad y seguridad en Europa del Este.
Mientras tanto, el Kremlin ha recibido con cautela la propuesta de alto el fuego de 30 días presentada por Ucrania y Estados Unidos. El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, ha indicado que Rusia necesita tiempo para evaluar los detalles antes de emitir una respuesta oficial. Esta reacción refleja la complejidad de las negociaciones y la necesidad de abordar las preocupaciones de todas las partes involucradas para lograr una paz duradera en la región. El País
En conclusión, la percepción de que la administración Trump podría estar alineándose con el plan de paz del Kremlin ha generado inquietud entre los aliados occidentales y plantea interrogantes sobre el futuro del conflicto en Ucrania. La situación requiere un enfoque diplomático cuidadoso para garantizar que cualquier acuerdo respete la soberanía ucraniana y contribuya a la estabilidad regional.
FUENTE: Kyiv Post exclusive
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