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SUSCRIBITEFORT LAUDERDALE, Florida, EE.UU. (AP) — Tres presuntos miembros de la pandilla MS-13 fueron acusados a nivel federal en relación con un asesinato ocurrido hace una década en Florida, anunció el viernes la fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, buscando resaltar el impulso del gobierno del presidente Donald Trump para someter a juicio a las pandillas violentas.
Bondi, junto con varios funcionarios de las fuerzas del orden, promovió en Fort Lauderdale los esfuerzos del Departamento de Justicia para perseguir a la pandilla, designada por la administración republicana como “organización terrorista extranjera” y a la que ha señalado como una amenaza derivada de la inmigración ilegal.
“Hay más arrestos por venir”, afirmó Bondi. “Si eres miembro de una pandilla y vives en este país, su yo fuera tú, me autodeportaría ahora mismo, porque vamos tras de ti”.
Los tres presuntos pandilleros forman parte de los nueve que han sido arrestados por cuatro asesinatos cometidos en el sur de Florida en 2014 y 2015. Los tres hombres, acusados a nivel federal el mes pasado, están acusados de participar en el asesinato de una persona que fue apuñalada unas 100 veces y que luego recibió disparos, dijo la fiscal general.
José Ezequiel Gámez Maravilla y Wilber Rosendo Navarro Escobar fueron arrestados en Florida. Hugo Adiel Bermúdez Martínez fue arrestado en Minnesota. Se enviaron correos electrónicos a los abogados de los hombres solicitándoles sus comentarios.
Las autoridades afirman que los violentos asesinatos en el sur de Florida se llevaron a cabo utilizando cuchillos o machetes. Los casos se reabrieron en 2020 tras quedar sin resolver, y en una de las investigaciones se realizó en 2021 una excavación de varios días para recuperar el cuerpo de Joel Canizales Lara, tras ser reportado como desaparecido en 2014.
El anuncio se produce una semana después de que Bondi elogiara el arresto del presunto líder de la pandilla MS-13 en la costa este.
En la última década, el Departamento de Justicia ha intensificado su enfoque en la MS-13, que se originó como una pandilla de barrio en Los Ángeles, pero creció hasta convertirse en una organización transnacional con sede en El Salvador. La pandilla tiene miembros en Honduras, Guatemala y México, y miles de afiliados en todo Estados Unidos con numerosas ramas o clicas.
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La reportera de The Associated Press Alanna Durkin Richer contribuyó a este despacho desde Washington.
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Esta historia fue traducida del inglés por un editor de AP con la ayuda de una herramienta de inteligencia artificial generativa.
FUENTE: Associated Press
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