El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, experimentó un momento embarazoso durante su participación en la XII Cumbre del ALBA-TCP en Venezuela, cuando el teleprónter falló varias veces, dejándolo sin palabras y poniendo en evidencia su dependencia del guion escrito.
Desde el inicio de su discurso, Díaz-Canel tuvo dificultades para mantener el hilo de su intervención al notar problemas con el teleprónter. La situación se tornó aún más crítica cuando intentó abordar el tema de la inteligencia artificial, quedándose completamente confundido y sin saber qué decir.
Su inseguridad fue evidente, con pausas prolongadas y dificultades para retomar el discurso de manera fluida. El incidente se volvió viral en redes sociales, donde numerosos usuarios se burlaron de la situación y criticaron su falta de capacidad para improvisar.
Durante su intervención, el mandatario cubano abordó temas como las deportaciones en EE.UU., la política migratoria del expresidente Donald Trump y el impacto del "criminal bloqueo" en Cuba.
Criticó las medidas migratorias estadounidenses, calificándolas de "violentas e indiscriminadas", y denunció la creación de un supuesto centro de detención para migrantes en la Base Naval de Guantánamo, señalando que representaba una "amenaza para la seguridad nacional de Cuba y la región".
Asimismo, responsabilizó a Washington por la crisis migratoria en América Latina, evitando hacer referencia al éxodo masivo de cubanos que huyen de la crisis económica y política en la isla.